Ford…FIEEEEEEESTAAAAAAA

Buenos días, buenos postas, ayer os hable de mi primer coche, y de algunas de las aventuras que viví, vaya vivimos mis amigos y yo en el, sin duda es un vehículo que siempre tendré en el recuerdo, disfrutamos de el de una forma brutal, y lástima que me la pegue y lo deje para siniestro total, porque en el habíamos disfrutado mucho.

Como ya comente ayer, mi segundo vehículo, fue un Ford fiesta diesel, de mi padre, que me lo dio con más de 300.000 km, y que yo estire hasta más de 500.000, cuando iba al mecánico a la revisión y me decían km y se lo decía no se lo creía, así que a los 500.000 deje de contarlos, y diría que fácilmente hice 50 o 70 mil mas, pero vaya, en el Ford fiesta, también tuve grandes momentos, recuerdo un día, viniendo de un partido en Tarragona, de llevar el cadete, en que íbamos miguel, un aficionado del sese del que ahora no recuerdo el nombre y yo, bien, al salir de Tarragona, hay una fuerte pendiente, y yo que iba hablando con miguel, y pisando a fondo, el de atrás, se iba quedando blanco, hasta que miguel me dijo, Jordi, no vas un pelín rápido?? La aguja del marcador, iba rebotando al final del mismo, y lo cierto es que el coche vibraba más que una lavadora centrifugando.

La verdad es que antiguamente, corría mucho con el coche, ahora, también corro, pero con un bebe a bordo, voy muchísimo más tranquilo, también es cierto, que mi vehículo actual es muchísimo más seguro y moderno, tiene solo 6 años, no como los anteriores, que de media tenían 15 o más, y lo cierto es que llevar un vehículo nuevo es algo mucho más divertido y sobretodo seguro.
Pero vaya, con el Ford fiesta lo cierto es que también hice muchos km, recuerdo un viaje, a Vitoria, para conocer a dos buenas amigas, Lorena y Edurne, y recuerdo que a la ida, pille viento de cara, cierzo si no me equivoco, y dándole al

máximo, el coche no pasaba de los 100 km/h, se me hizo eterno el viaje, y cuando llegue a casa de Edurne simplemente no me podía ni mover, me quede con forma de cuatro, suerte que después entre la buena compaña, el buen comer, el ir a ver al Taugres ( ese era su nombre por entonces) baskonia y el tapeo por Vitoria, me recupere…bueno del beber por Vitoria digamos que mi hígado no se recupero tan rápido, pero por aquel entonces, mi aguante a las bebidas alcohólicas era mucho mayor que al de ahora, así a la vuelta, el mismo viento que me hizo ir a 100 paso de entorpecerme, a empujarme, y lo cierto es que cuando me di cuenta, y sin pisar a fondo, volvía a ir con la aguja del marcador rebotando contra el final del mismo, lo cierto es que la vuelta se me hizo muy corta, y con unos buenos recuerdos en la mochila y un buen par de amigas en el zurrón.
Con el Ford fiesta, tuve también un accidentillo, me salte un ceda al paso, y deje los faros…que enfocaban a 4 o 5 enfrente…con las largas puestas, así que me toco arreglarlo, y bueno, una vez me lo ponen todo en su sitio, me dijeron que pintar de blanco, ese era el color del coche el capo me iba a costar unas 50.000 de las antiguas pesetas, así que…no lo pinte, y me gaste la pasta, en ponerle unos amortiguadores nuevos…con 400.000 km los de origen ya estaban algo deteriorados, y tocaba cambiarlos, y fue una bendición, con los amortiguadores nuevos…podía correr muchísimo más.
Por desgracia, el Ford fiesta, también tenía aire acondicionado, y un par de veces se me rompió la ventanilla y no podía bajarla, con lo que me asaba en el interior del coche, pero sin dudarlo, el Ford fiesta también hizo honor a su nombre, y fue un coche con mucha fiesta,…algunas veces demasiada fiesta, pero quien no ha cometido pecados de juventud, y algún que otro exceso?