Adrenalina

Buenos días, buenos post, aquí me tenéis, escribiendo tras ver el Chelsea – Barça, que hemos perdido por 1 a 0 pero en que la verdad, no me voy disgustado, hemos jugado bien,  hemos tenido muchas ocasiones, pero no hemos ganado, una lástima pero son cosas que pasan.

La verdad, es que para mi aparte de ganar, es importante como se gana, soy de los que piensa, que se ha de ganar jugando bien, eso como norma, y que cuando en general ganas jugando bien, puedes llegar a ganar un día jugando mal, y eso he intentado aplicar cuando he sido el primer entrenador de un equipo, unas veces con más suerte, otras con menos, pero intentarlo lo he intentado.

Pero vaya, no vamos a hablar de deportes hoy, demasiado en los últimos días, así que hablaremos de cualquier otra cosa, por ejemplo os recomiendo que os leáis una entrada, en un blog, que ha recibido más de 600.000 visitas estos días, la verdad es que su escritor da en el clavo más absoluto, os pongo el link para que podáis leerlo el blog es:

• http://principiamarsupia.wordpress.com/ y la entrada que debéis leer, es la de la carta al rey…simplemente genial.

Lo cierto es que hay gente que escribe cosas  muy buenas, y se merecen que sean leídos y divulgados, y este es sin duda un caso para enmarcar.

A todos los que escribimos un blog, nos encantaría que un día, uno de nuestros post, tuviera esa repercusión, joder, si yo el día que llego a 80 visitas me pongo a pegar brincos, imaginaos si tuviera 600.000 vaya tiene que ser simplemente un subidon de adrenalina brutal, a mi la adrenalina me gusta, saltar desde 12 metros en Menorca, ir a velocidades altas con el coche, tirarme por sitios que no debería cuando esquío… la verdad la adrenalina engancha,

Recuerdo una vez, con mi buen amigo Ramón, volviendo de esquiar de Port del Compte, allí, ya hicimos alguna bajada al límite de nuestras posibilidades, que en aquellos momentos no eran demasiadas, pero recuerdo un par de bajadas, de esas en que dices, ufff no puedo forzar mas y a la vuelta, en el coche, recuerdo que Ramón, dejémoslo en que iba algo rápido, y en una curva muy cerrada, hicimos un trompo tremendo, suerte que Ramón domina el coche a la perfección, porque con otro al volante…nos pegamos un ostión de padre y señor mío, cierto es que eran otras épocas, y la velocidad no estaba tan perseguida como ahora, pero cuando me toco conducir a mí, digamos que el Golf voló durante un buen trayecto subiendo el  velocímetro a altas velocidades, y superando los 200 km/h, en un tramo de carretera en que íbamos solos, la verdad es que la velocidad engancha, ya sea en unos esquís, en coche, en bici…en lo que sea, es por ello que no me quiero comprar una moto, porque se, positivamente, que iré demasiado rápido, así para evitar la tentación, no me la compro y santas pascuas.

Una de las mayores subidas adrenalinicas de mi vida, sin duda, me las dio mi deporte favorito, durante la pretemporada, en las pruebas para fichar por el SESE, un par o tres de jugadores, a los que se ofreció ficha, dijeron que no, que preferían irse al Grup Barna, por que según ellos había más nivel que en nuestro equipo, así a las pocas jornadas de empezar,  jugamos en casa contra ellos, en casa, y ganamos, y en la segunda vuelta ( nosotros íbamos primeros y ellos segundos) el gran partido era en La Nau del Grup Barna, ellos prepararon el partido a conciencia, y nosotros también, el partido fue intenso, duro, divertido, y es, probablemente el mejor partido que he hecho en mi vida, forcé como 5 o 6 faltas en ataque, raboteé como un loco cogiendo más de 20 reb, y sobretodo,  defendí al mejor pívot con el que jamás he jugado, y lo anule, solo me metió una canasta, un fadeway contra el que no pude hacer nada, pero el resto del partido, me lo comí ( después con el sénior A metió como 20) y sobretodo ganamos de 1 punto,  la semana de después de ese partido, simplemente fueron los mejores entrenos en que he participado, el subidon de esa victoria, nos llevo a todos a tal nivel de hiperactividad que  nos salíamos, y los que vinieron a casa después de ese partido, sufrieron unas buenas palizas.

En fin que soy un adicto a la adrenalina, y no me importa reconocerlo, pero lo cierto es que la sensación que tuvimos durante, y sobretodo después de ese partido, es inenarrable y ojala consiguiera repetirla.