Buenos días, vaya noches, la verdad, es que estoy de subidon, después de ver el Barça real Madrid primer partido de la final de la liga Endesa, el final ha sido apoteósico, ganando el partido con un triple final desde unos 9 metros mediante un tiro a una sola pierna y a tablerazo frontal de un Huertas que hoy solo ha metido esos 3 puntos, pero que 3 puntos, ya que han dado un triunfo agónico y el primer partido de la final.
El baloncesto, es un deporte de sensaciones, cuando las tienes, todo sale, ese tiro difícil, esa entrada complicada, ese balón que te llevas, cuando son malas, no sale nada, y hoy hemos visto 26 min de malas sensaciones del Barça o buenas del Madrid, y 14 al revés, pero los 14 buenos del Barça, han sido muy buenos, con una defensa que ha subido la intensidad, y han aparecido una serie de jugadores que han asumido responsabilidades, navarro por un lado, Pete por otro, ellos han dado ese pasito hacia adelante y han tenido fe.
Porque una parte importante en este juego, es tener fe, creer en uno mismo, y cuando tienes jugadores que tienen fe, fe en sí mismos, fe en el equipo, fe en sus compañeros, entonces tienes un equipo difícil de vencer, y hoy el Barça, mi equipo ha ganado, por que ha tenido fe, muchísima fe, cuando yo juego, evidentemente no a esos niveles, también tengo mucha fe, en mi sin duda, en mi equipo siempre, cuando confías en tus compañeros, estos responden, y hoy eso ha hecho el Barça, confiar en su equipo, jugar muy duro, y picar piedra, defensa, defensa y mucha más defensa, y después buscar la suerte, porque la suerte no se tiene, se busca, y solo la consigue el que está ahí buscándola y pencando.
La verdad, es que la canasta de Marcelinho Huertas es el sueño de todo jugador de baloncesto, meter la canasta ganadora en el último segundo y de una final, aunque sea un playoff final, pero sin duda es el sueño de todos, meter una canasta ganadora, y si es en una final mejor que mejor.
Yo por suerte he ganado algún partido así en el últimos segundo, y no recuerdo haber perdido ninguno con una canasta como la de hoy, si perder en la última jugada, pero no de un tiro tan difícil como el que hoy ha metido Huertas, pero sin duda la sensación de alegría/decepción de una canasta así es brutal.
En fin, que este deporte es maravilloso, y pasan cosas imposibles, ganas partidos que dices…no se podía ganar, era inganable…y ganas, y otros que dices, no puedes perder…y vas y pierdes, y esa volatilidad, esa incertidumbre, hace que te mantengas los 40 min con la tensión al 200%, y eso es adictivo, por eso me gusta el baloncesto, porque es simplemente maravilloso, es imprevisible, es duro y sobretodo, es divertidísimo de ver…y no quiero ni contaros como lo es de practicar.
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