El otro día, mis suegros, la tía ascensión, mis cuñados…todos, hablábamos de una cosa, que no sabíamos cómo definir, pero que acabamos denominando, EL ESPIRITU LAS NEGRAS.
Y como podríamos definir, EL ESPÍRITU LAS NEGRAS, pues bien, quizás, más que definirlo, sería mejor antes, describirlo, y quizás de esa descripción, consigamos una buena definición.
Lo cierto es que estos días, todos, tanto las peques como los mayores, podríamos decir que nos hemos medio asilvestrado un poquito, me voy a explicar, en Las Negras, vas todo el día en bañador, vas todo el día, medio descalzo o directamente sin el medio, vas descalzo.
Por tanto vas todo el día medio agitanado, las peques, que van morenas como tizones, corren todo el día por el edificio , en bañador, descalzas, o en chancletas, y la máxima preocupación que tienen, es saber a qué hora se merienda, se come o se cena.
Los mayores, tres cuartos de lo mismo, ya que la fase más estresante del día, es pensar si nos ponemos el bañador azul o el rojo, y saber a qué hora comeremos…y donde, si será en casa, o será en el Manteca.
Podríamos decir, que reina un espíritu de libertad, un espíritu de relax, un espíritu de continua diversión, un espíritu que hace que cualquier hora sea buena para cualquier cosa, ya sea para merendar, para darse un baño en la playa, o irse de cabeza a la piscina, un espíritu que hace que cualquier momento sea bueno para sentarse a tomarse una coca cola, una cerveza, o para robarle las niñas un poco del yogurt griego que tiene el abuelo Ramón en la nevera.
Podríamos decir, que EL ESPIRITU LAS NEGRAS es el espíritu de las vacaciones, unas vacaciones además, informales, unas vacaciones en un parque natural, agreste, salvaje, duro y seco, donde el sol abrasa casi todo, donde el poniente, cuando sopla, abrasa y curte las pieles de los bañistas.
EL ESPIRITU LAS NEGRAS es esa sensación de libertad que da estar en un lugar paradisiaco, donde no importa el cómo vas…sino él como estas, donde no importa si el bolso que llevas es de Versace o comprado en el chino de al lado, donde lo importante, es encontrarse con los amigos en la plaza o en el pasillo para jugar a lo que sea.
Donde los mayores, su máxima preocupación es avisar a los padres de los vecinos de abajo, que sus pequeños están en tu comedor, jugando con tus hijos, o que te avisen que Carla está en casa de los vecinos.
EL ESPIRITU LAS NEGRAS, es ese que hace que suene el timbre de tu puerta para que tres críos pregunten si esta alguna de mis sobrinas para irse a jugar con ellas, o que directamente, entren en tu comedor, para preguntar por Carla, Laia o Mireia.
La verdad, esta sensación, esta brutal sensación de libertad, de despreocupación general, es maravillosa, esta sensación de poder ir todo el día, como queramos, sin preocuparnos de si hay que vestirse así o asa, esta sensación de que podemos ir como queramos, y que podemos estar en el centro de las negras, en bañador, descalzos y tomándonos una cervecita fresca donde sea, es simplemente brutal.
EL ESPIRITU LAS NEGRAS, no sé deciros que es, quizás un compendio de muchas cosas, pero lo que si se, es que hace que LAS NEGRAS, en el Cabo de Gata, en medio de un paraje natural sin igual, sea especial, y puedo decir, que este ESPIRITU LAS NEGRAS, no solo está en verano, sino que está siempre que venimos.
Es seguramente, eso que hace especial a Las Negras, y es un espíritu, primo hermano, del que yo tenía de pequeño, en Cistella, o quizás, es simplemente, que se ha trasladado desde l’Emporda profundo, a las inmediaciones de Nijar….pero os aconsejo, que este verano, busquéis allí donde estéis, ese ESPIRITU LAS NEGRAS…porque os va a hacer disfrutar de lo lindo.
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